Estamos acostumbrados a leer noticias en las que se habla del riguroso sistema de clasificación por edades que hay en Australia. Algunos videojuegos se han quedado sin salir allí o han tenido que ser revisados antes. El motivo de esto es la ausencia de una clasificación para mayores de 18 años en los videojuegos. Los jugadores australianos ya están cansados de esta situación y se han puesto manos a la obra para tratar de ponerle fin.
De entrada, están organizando una protesta en la entrada del Parlamento de Adelaida para el próximo 4 de marzo. Lo original es que se ha convocado a los asistentes pidiéndoles que vayan disfrazados de personajes de videojuegos.
Aunque pueda parecer una buena forma de llamar la atención de los medios de comunicación, muchos piensan que resultaría contradictorio pedir una clasificación para adultos llevando disfraces. Tenéis más información sobre la portesta y algunas opiniones muy interesantes en GamePolitics.
